Queja

¡Ritmo misterioso que del alma huyes

y la soledad confusa al alma

entristecida llevas!.

No conozco el salmo de las horas muertas,

pero si los sueños de la fuente seca.

¡Ay!, ¿Dónde olvidaste tu ilusión primera?.

¿Qué fué de aquellos risueños amaneceres,

que quedaron, en tu adolescencia?.

Una mañana serena, sonreías por que,

en tu jardín, brotó una rosa roja y te sentiste

mujer: en tus ojos hubo luz y sombra y,

entonces comprendí, por que se llora  y comprendí

por que se ama hasta la locura.

Mi amor, mira las imagenes que un sueño

engendra y el amor que el tiempo borra...

¡ay!, ¡agrío despertar!. 

¡Ay!, ¡encrucijadas silenciosas!, 

donde tus sueños de ayer  se enternizan y

dan al amor sabios y hermosos consejos.

¡Ay!, si como la fuente pudiera cantar mi alegría,

¡en un temblor de lagrimas, te llevo siempre

conmigo y temo, que un día, seas en mí,

amarga primavera!.

¡Cielo mío, enseñame donde acaba la locura

y donde empieza la razón...!

Mariposa de Amor

pseudónimo - Agosto, 2012

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